Beneficios del ejercicio en la mente del hombre

La mente del ser humano representa todo un universo. De hecho, hay muchos misterios que encierra la mente, como gestora del pensamiento y la realidad en la que vivimos. Incluso, estudios en filosofía han llegado a afirmar que el mundo en el que vivimos es solo una simulación coordinada por nuestras mentes.

Por eso mismo, un hombre que posea una mente organizada y con emociones despejadas, viaja por un camino certero para conquistar todas las metas que se proponga. Pero para llegar a un nivel de armonía con tu propia mente, también tienes que tener autocontrol sobre tu cuerpo.

Una manera exquisita de dominar tu cuerpo y tener control sobre este es a través del ejercicio. La actividad física te ayuda a reconocer los límites de tu propia materia, tu voluntad y fuerza. Y eso se reflejará naturalmente a través de tu mente.

En esta entrada, conocerás a fondo lo que representa la actividad física para tu mente como hombre y alfa:

Te proporciona un mejor nivel de energía

Cuando te ejercitas, colocas a prueba tu nivel de energía. Sí, al final de una hora de trabajo físico vas a sentirte agotado; a la mañana siguiente vas a sentir tu cuerpo agarrotado, con ciertas molestias. Esa sensación es inevitable porque tus músculos se han esforzado.

Pero a largo plazo, a medida que tu cuerpo se adapta, tu energía se eleva. Todo esto como fruto de la actividad que vive tu sistema circulatorio y los niveles de oxitocina que segrega el hipotálamo. Esa oxitocina es la que disipa los niveles de estrés y potencia tu voluntad.

En estados así, las ideas que lleguen a tu mente podrás asimilarlas y enfocarlas adecuadamente.

Relaja tu sistema nervioso

Además, durante la actividad física, cuando llegas a esos estados donde sientes que tu cuerpo se quema por la fatiga, tu cuerpo libera dopamina. Esta dopamina aporta significativamente a regular tu sistema nervioso, creando una sensación similar a lo que ocurre cuando liberas adrenalina.

En consecuencia, tu cerebro y todo tu sistema nervioso se relaja. La actividad neuronal se intensifica y tu manera de pensar se organiza de manera significativa. No vas a tener la presión del estrés dominando tu cuerpo, que fastidia a tu pensamiento y presiona a tus emociones.

Te permite tener un tipo de sueño más profundo

Los niveles de fatiga que intencionalmente vive tu cuerpo cuando te ejercitas, te pasarán una fantástica factura. Cuando llega la hora de dormir, tu cerebro entrará en una fase de hibernación profunda para restaurarte al máximo. En dicha capa tan avanzada tu metabolismo se regulará.

En consecuencia, el tipo de sueño que vives permite que el almacenamiento de datos en tu memoria sea más consistente. Por eso mismo, las personas que se ejercitan desarrollan un gran nivel de atención y recuerdan mejor, teniendo una coordinación más clara sobre su cuerpo y su mente.

Disminuye tu ansiedad

Tener un metabolismo que marcha adecuadamente, impactará de manera directa sobre tu nivel de ansiedad. Cualquier tipo de estrés se reducirá al máximo, no solo por todo lo que enfocaste tu mente durante el ejercicio, sino también por la alegría que experimentaste al vivirlo.

No serás más víctima de ningún tipo de estrés y tendrás tu mente despejada, al margen de cualquier tensión. Toda ansiedad es fruto de bloqueos de energía. Son ideas y emociones que han quedado pendientes por resolver o cumplir.

Al proyectar tu energía a través de la actividad física, esta energía reprimida y refrenada por tu mente es liberada. Será como si rompieras un nudo invisible que posee tu pensamiento. Así que en la medida en que te entrenes, menos serás presa de la ansiedad.

Define tu figura y aumenta tu autoestima

Y por supuesto, no podía faltar el que toda la actividad física redefine tu figura. La próxima vez que te mires en el espejo podrás contemplar lo fornido que estás. Esto impacta directamente en tu autoestima, porque sientes que esculpir tu cuerpo es fruto de dedicación, pasión y entrega.

Tú mismo has logrado desbloquear el logro de dignificar tu cuerpo a través de esfuerzo y paciencia. Eso te hará sentir muy cómodo contigo mismo, garantizándote una gran estabilidad emocional. ¡Toda la mente de un alfa!